¿Buscando pisos en el Casco Histórico de Zaragoza? El Casco Histórico es la zona más emblemática de la ciudad, un barrio con un importante legado histórico y cultural que refleja en sus calles el paso de cuatro civilizaciones: la romana, la musulmana, la judía y la cristiana.
Se trata del segundo casco histórico más grande de España, repleto de monumentos emblemáticos, pero también es el epicentro de la vida en la ciudad, a nivel cultural, de actividades, gastronómico y de ambiente nocturno.
Si tienes la suerte de ser uno de los propietarios de pisos en el Casco HIstórico de Zaragoza, o si solo estás de visita en la zona, un paseo por el barrio te permitirá disfrutar del espíritu de la ciudad antigua, que se ha mantenido a lo largo de los siglos en los rincones del casco.
El casco viejo está lleno de callejuelas bulliciosas y pequeñas plazas llenas de tiendas y bares de tapeo, pero también tiene varios parques y riberas por los que pasear si lo que se busca es un poco de tranquilidad.
Tanto si te decides por buscar pisos en el Casco Histórico de Zaragoza, o si visitas el barrio, esto es lo que no te puedes perder:
Visitar la Basílica del Pilar
Es el símbolo de la ciudad de Zaragoza y uno de los santuarios marianos más importantes del mundo, que cada año visitan miles de peregrinos. Hasta allí se acercan para contemplar ‘el Pilar’, una columna en la que, según la leyenda cristiana, María se habría aparecido.
Inicialmente fue un edificio gótico-mudéjar, que se quedó pequeño ante el creciente número de fieles, y que fue ampliado en el siglo XVII bajo la influencia del barroco. La basílica es un monumento arquitectónico impresionante, que además reúne en su interior obras de gran valor, especialmente los frescos pintados por Goya.
La plaza del Pilar, donde está ubicada la basílica, es una de las zonas más turísticas de Zaragoza, y también es un punto importante de las fiestas patronales, pues allí se hace la ofrenda de flores a la Virgen del Pilar cada 12 de octubre.
Viajar al pasado en las murallas romanas
La romana Caesaraugusta estaba rodeada de una muralla y unos 120 torreones defensivos que protegían un perímetro de 3 kilómetros, recorriendo las calles Echegaray y Caballero, el Coso y la avenida de César Augusto.
De la antigua muralla romana se conservan en la actualidad dos tramos cuya visita supone un auténtico viaje al pasado. El más largo mide alrededor de 80 metros y está en la avenida de César Augusto, mientras que el otro tramo se encuentra en la calle del Coso y forma parte del convento del Santo Sepulcro, que se construyó sobre la muralla.
Para completar este viaje al pasado puedes visitar también otros vestigios romanos de la ciudad, como las termas públicas, el foro de Caesaragusta, el teatro romano o el puerto fluvial.
Comprar artesanía en el mercado de la plaza San Bruno
El mercado de la plaza San Bruno es un rincón especial, junto a la Seo, en el que todos los domingos y festivos por la mañana se pueden encontrar todo tipo de antigüedades y artesanía. Es un paseo obligado para aquellos que quieren curiosear y sorprenderse con objetos del pasado.
Se celebra desde hace veinte años y en sus puesto se puede encontrar casi de todo: discos, libros, cómics, pinturas, antigüedades, objetos curiosos… O si prefieres también puedes comprar en el mercado de plaza San Bruno productos gastronómicos artesanales, como pan, quesos, patés y embutidos.
Este mercadillo es cita obligada para turistas y zaragozanos, que normalmente terminan su visita dominical tomando un aperitivo en algún bar de las cercanas plaza de Santa Marta o de la calle Jordán de Urriés.
Ir de tapas por El Tubo
Después de pasar todo el día visitando la ciudad, lo mejor es dedicar la tarde-noche para sumergirse por el caso histórico y degustar las mejores tapas de la ciudad. En la zona de ‘El Tubo’, locales y turistas se entremezclan en calles estrechas para degustar la gran variedad de tapas que hay en sus restaurantes y tascas, sin olvidar el buen vino y las cañas.
Entre los locales más famosos, no puedes dejar de probar las anchoas de las Bodegas Almau, las tapas elaboradas a partir de ternasco de Aragón de La Ternasca o el taco de carne picante de Vinos Nicolás.
Otro sitio muy curioso que puedes visitar es La Ballena Colorá, donde sirven una única tapa: la ballenita, pan con anchoa, boquerón y pimiento, una delicia. En El Champi también se centran en un solo producto: los champiñones más famosos de la ciudad.
Si ya tienes claro que este es el barrio donde te gustaría vivir, consulta nuestra oferta de pisos en el Casco Histórico de Zaragoza. Y si quieres descubrir otros barrios emblemáticos de la geografía española, visita nuestra sección Vivir en.
